martes, 4 de noviembre de 2014

Cuando uno viaja y vuelve a casa, primero llega el cuerpo y luego el alma ...

En el primer mail que envió Valeria, después de la despedida, citaba una frase de Atahualpa Yupanqui:  
"Cuando uno viaja y vuelve a casa, primero llega el cuerpo y luego el alma"

Qué gran verdad!!!! Y yo añadiría que el alma no vuelve completa, sino que se queda una parte, en donde has estado, sobretodo si te han tratado como a nosotras!!!!

Las palabras dichas quedan en el corazón pero corres el riesgo de que acabe llevándoselas el viento, pero las escritas, permanecen toda la vida, siempre que haya alguien que las lea.

Cuando me preguntan qué es lo que más me ha gustado de Argentina, respondo lo mismo, la gente. Tal vez tengamos grabado que los argentinos son unos liantes, que te embaucan con la palabrería, que te engañan, que son "psicólogos liantes" y te llevan a su "camino", y miles de tópicos, que durante los días que hemos estado allí, hemos podido comprobar que son falsos. Al menos, toda la gente con la que hemos intercambiado alguna palabra, ha sido agradable, amistosa, amable, dispuesta a ayudarte en cualquier momento, alegre, curiosa, despierta, humilde, sencilla ...

Pero en ese pequeño lugar del mundo, llamado Río Ceballos, esos adjetivos se quedan minúsculos ante el recibimiento y la acogida que hemos sentido. Muchas gracias a Antonio y a Graciela, que, por culpa de un par de españolas :), tuvieron que acoger en casa a Nico y Vale, su amabilidad, y entrega, quedará siempre en nuestros corazones. Gracias, también, a Susi y a Vero, por todas las muestras de cariño que nos dieron y que llevaremos siempre con nosotras. A Luis, por venir a buscarnos, llevarnos al aeropuerto y quedarse allí hasta el momento de la partida, siempre con una sonrisa y explotando de felicidad y buen rollo. No me olvido de Mariano, el guapo, que, a pesar de su timidez y de los malos ratos que le hicimos pasar, su semblante fue siempre sonriente, y nos brindó, junto con "la parejita", un conciertazo de alto nivel.

Y qué decir de los anfitriones, Nico y Vale, durante los casi 4 años que estuvieron en Barcelona, pensé ... son muy buena gente, pero después de estos días, me han demostrado que son unas de las mejores personas que he tenido el gusto de conocer, y que tengo la suerte de contar entre mis mejores amigos ... No quiero resultar ñoña, pero parece increíble, que casi sigilosamente, "hayan colonizado", aun más si cabe, mi corazón. No sé cuántas veces he dicho en estos días "gracias" pero seguiré repitiéndolo cuantas veces sea necesario!!!!

Y vuelvo a repetir lo que decía la letra de la canción :
(...)
Esto no es un adiós,
es simplemente un hasta luego
esperando, esperando volver pronto a vernos
Pero ... la próxima ... en Barcelona!!!!! Je Je!!!!!!



No hay comentarios:

Publicar un comentario